Decorar la habitación del nuevo bebé

Fecha de publicación: 28-08-2017

Decorar la habitación del bebé es una tarea importante que nos llena de emoción y alegría.

Para la mayoría de las familias, preparar y decorar la habitación del bebé es algo más que una laboriosa tarea, pues se convierte en una fuente de emoción y alegría por la llegada de un nuevo integrante para la familia. Normalmente, alrededor de los seis o siete meses de embarazo, los padres suelen encargarse de proveer todo lo que el pequeño va a necesitar en su habitación.

La decoración, la elección de los colores y la temática, los muebles y el tipo de iluminación, son tareas que disfrutarán los padres. Sin embargo, es preciso organizar las ideas para que no se pase ningún detalle y así, el cuarto del recién nacido sea un ambiente cálido, agradable, relajante y cómodo.

Uno de los aspectos más importantes que deben tener en cuenta los padres cuando están organizando la habitación del bebé, es la seguridad, es decir, crear un espacio seguro donde el bebé a medida que crezca pueda explorar su entorno sin peligro. Para ello, deben utilizarse pinturas que no sean tóxicas, proteger los enchufes y en lo posible, comprar muebles con esquinas redondeadas para evitar accidentes.

Precisamente en cuanto al mobiliario, debe estar conformado básicamente por la cuna, el armario y el cambiador. Con estos tres muebles, se tiene lo necesario para cubrir sus necesidades como son dormirlo, vestirlo y cambiarlo. Progresivamente, en la medida en que el bebé crezca, se pueden incorporar una silla, un cajón o baúl para guardar sus cosas y una mesita para cuando empiece a dibujar o hacer sus tareas escolares.

Y si de elegir los colores se trata, son recomendados para los bebés, los tonos suaves que transmiten tranquilidad y ayudan a que el bebé duerma mejor. El blanco, el beige o el gris claro son de los más usados y sirven tanto para niño como para niña.

Las paredes también se pueden decorar con láminas decorativas o vinil que le darán un toque único y original a la habitación. En realidad, no es necesario exagerar en cuanto al tema de los colores en las paredes, bastará con elegir un color y utilizar elementos decorativos para hacer más alegre la habitación.

Con la iluminación es recomendable que además de la luz convencional del techo, la habitación disponga de una luz más tenue que puede incorporarse con un plafón en una pared o una lámpara de noche. Es de mucha utilidad en aquellos momentos de descanso y relajación.

Las cortinas constituyen otro elemento útil para controlar la entrada de luz natural durante el sueño diurno del bebé. Es aconsejable que estén hechas de materiales que eviten la acumulación de polvo, para prevenir alergias.

Asimismo, la ropa de cama en este caso para la cuna, debe ser preferiblemente de algodón, ya que así se evitarán posibles alergias en la piel y al contacto se sienten suaves, acorde con la delicada piel del bebé. Y el colchón para la cuna debe ser de goma espuma, fibras naturales o de relleno hipoalergénico.

Escoger una temática para la nueva habitación, también es una brillante idea. Todos los motivos que escojamos para la habitación de nuestro pequeño deben ser armonizados tanto con el color de las paredes, del piso, la ropa de cama, las cortinas y los muebles. Asimismo, debemos elegir motivos infantiles, de tonos pasteles, bien difuminados y jugar con los cuadros y los muñecos de peluche, para que sean un verdadero toque decorativo de la estancia del bebé.