Prevención al visitar una discoteca

Fecha de publicación: 29-08-2017

Al visitar una discoteca para disfrutar o festejar algún motivo especial, la seguridad debe comenzar por nosotros mismos..

En las sociedades modernas y más aún, en ciudades cosmopolitas, es muy común realizar las celebraciones de cumpleaños, aniversarios o graduaciones en alguna discoteca o lugar nocturno y aunque sea una práctica muy arraigada, sobre todo en el público joven, no siempre estos lugares ofrecen en sus instalaciones la seguridad mínima requerida para quienes los visitan.

Desafortunadamente, en más de una oportunidad hemos visto en las noticias incidentes ocurridos en estos lugares con cientos de heridos e incluso fallecidos en virtud de tratarse de establecimientos que no disponían de los elementos mínimos de seguridad como por ejemplo, salidas de emergencia o extintores contra incendios.

Por esta razón, la seguridad debe comenzar con nosotros mismos, tomando ciertas previsiones personales, destinadas bien sea a evitar factores de riesgo o en su defecto, a saber enfrentarlos si se llegasen a materializar.

Una de las primeras recomendaciones a considerar, está relacionada con la decisión o selección del lugar donde vamos a celebrar. Por ejemplo, si está ubicado en una zona donde hay antecedentes de la existencia de un alto nivel de delincuencia, puede haber mayor riesgo de hurtos de vehículos, venta callejera de drogas, alcohol y por consiguiente, personas agresivas y violentas por encontrarse bajo estos efectos. Lo recomendable es evitar estos lugares.

Otra sugerencia en lo concerniente con nuestra seguridad, consiste en no ingerir alcohol antes de llegar al establecimiento, ya que la ingesta de licor exacerba los ánimos de cualquier persona, lo que podría generar un incidente o conflicto desde la propia puerta de entrada del establecimiento.

Si el lugar cuenta con valet parking, es aconsejable utilizar este servicio puesto que de esta manera, nuestro vehículo estará menos expuesto a un robo, ya que los sistemas de seguridad convencionales como las alarmas, poco pueden ayudar debido al alto volumen de la música, ya que no podríamos escucharla.

Una vez dentro del lugar, bien sea que estemos solos, en pareja o en un grupo de amigos, debemos tener conciencia de las salidas de emergencia, lo que nos podría resultar de gran ayuda a la hora de suscitarse alguna emergencia, pues ya estaremos ubicados para abandonar el lugar con la premura que se necesita en este tipo de situaciones.

Evitar tomar bebidas que no sean enlatadas o embotelladas, de las cuales podamos dar fe del momento de su apertura es fundamental. El mayor promedio de violaciones o hurtos, se da por la indefensión generada por el uso de narcóticos en el licor; si no hay bebidas cerradas, es preferible evitar su consumo.

Por lo general, el alcohol utilizado en las barras libres es de baja calidad; ello puede generar algunas reacciones secundarias como alergias, alteración de los nervios o problemas digestivos,  por tanto, se recomienda no beber en barra libre.

De igual manera, si vamos a la discoteca en parejas o grupos de amigos, una buena idea sería designar a una persona responsable del traslado de retorno, la cual debe mantener la sobriedad para salvaguardar su seguridad y la del grupo hasta llegar a los respectivos hogares.

Otra acertada actitud, consiste en llevar entre nuestras pertenencias, una lista con números de teléfono de emergencia o familiares a quienes llamar en caso de algún accidente, para que las personas que auxilien tengan una rápida referencia sobre a quién avisar.

A pesar de ser un lugar para la diversión, debemos incluso ser responsables en las celebraciones, observando una actitud pacífica en todo momento, evitando confrontaciones con desconocidos para evitar hechos de violencia; la idea no es pasar un mal rato, sino disfrutar entre familiares y amigos.

Ahora más que nunca, las discotecas y clubes nocturnos, deben asegurarse de ofrecer al cliente el mejor de los servicios, no sólo en la calidad de las bebidas, sino en la capacitación de su personal y las condiciones generales del inmueble; tanto la competencia, como los consumidores deben impulsar a estos establecimientos a esforzarse aún más por complacer las necesidades del cliente y comenzar por brindarles un lugar seguro donde puedan divertirse.