Virus más comunes en plantas

Fecha de publicación: 15-06-2016

Para todo amante de la jardinería y la agricultura es importante conocer los virus más comunes en plantas..

El estudio y combate de virus vegetales tiene un gran desarrollo en virtud del impacto que estas enfermedades generan en el sector agrícola

Algunos de los tipos de virus que infectan a los humanos también pueden afectar a las plantas. Las plantas y los humanos no se transmiten mutuamente los virus, pero los humanos si pueden contagiar a las plantas mediante el contacto físico.

Con frecuencia, las plantas resultan afectadas cuando un insecto u otro animal pequeño invaden la armadura de celulosa que las protege del ambiente. Los virus también se dispersan a través de semillas, tallos, viento, agua, polen y savia infectados. A diferencia de los humanos, las plantas nunca se recuperan de un virus, de allí lo fundamental de protegerlas contra ellos.

Hasta el momento, se llevan identificados más de 700 virus que se clasifican en diversos géneros según la estructura de su cápside, la naturaleza de su genoma, su forma de transmisión, su hospedante y sus mecanismos de replicación e infección. A continuación veremos algunos de los más comunes.

Virus Mosaico del Tabaco. El primer virus de plantas descubierto, el virus Mosaico del Tabaco (TMV, por sus siglas en inglés), ataca a los miembros de la familia de las dormideras o Solanaceae. Estas plantas incluyen el tabaco, la pimienta, las papas, el tomate, la berenjena, los pepinos y las petunias. El virus se transmite a través de rupturas en la pared celular provocadas por los insectos o por daños físicos. Este virus también es famoso por haber sido el primero captado mediante un microscopio de electrones.

Virus mosaico del pepino. El virus Mosaico del Pepino infecta a pepinos, tomates, pimientos, melones, espinacas, apios, remolacha y a otras plantas. Los insectos lo transmiten al causar daños físicos a la planta, que permiten la entrada del virus a través del viento, el agua o la savia. El virus provoca que las hojas jóvenes se tuerzan. Detiene el crecimiento de la planta y provoca producciones bajas de hojas o frutos.

Enanismo amarillo de la cebada. Infecta a varios tipos de granos y otros cultivos básicos, incluyendo el trigo. Principalmente los insectos propagan el virus que, entre otras cosas, causa decoloración de las hojas y las puntas de las plantas, lo que reduce la fotosíntesis, detiene el crecimiento y disminuye la producción de granos.

Podredumbre del tallo. Infecta a la soja, un cultivo primario. Provoca que el tallo se doble en la punta y los retoños se tornen de un color marrón y caigan de la planta. Los nematodos propagan este virus.

Virus mosaico de la caña de azúcar. Decolora las hojas de la planta de la caña de azúcar, restringiendo su capacidad para alimentarse mediante la fotosíntesis y crecer. Paraliza el crecimiento de las plantas jóvenes. Los insectos y las semillas infectadas propagan el virus.

Virus mosaico de la coliflor. Infecta a los miembros de la familia de las coles o la mostaza, que incluyen a las coles, las coles de Bruselas, la coliflor, el brócoli y la semilla del rapé. Provoca manchas en forma de mosaico sobre las hojas, lo que detiene el crecimiento. Los pulgones y otros mecanismos de exposición propagan el virus.

Virus mosaico de la lechuga. Mancha las hojas de casi todos los tipos de lechugas, deteniendo su crecimiento y eliminando su atractivo para el mercado. Los insectos y las semillas infectadas propagan el virus.

Virus mosaico del maíz. Provoca manchas y vetas amarillas en las hojas del maíz, deteniendo su crecimiento. Las chicharras propagan el virus.

Virus roseta del maní. El virus roseta del maíz provoca decoloración y distorsión de las hojas del maíz y otros rizomas, deteniendo su crecimiento. Los pulgones y la savia propagan el virus.

Desde hace más de medio siglo, los virus vegetales son estudiados por numerosos grupos científicos para entender sus mecanismos de infección y conocer las interacciones entre estos patógenos y sus plantas hospedadoras. Hoy en día es importante entender esta compleja relación para la búsqueda y el desarrollo de nuevas estrategias que permitan combatir el ataque de estos agentes patógenos.