Qué es repostería

La repostería es una de las áreas más bonitas y de mayor arraigo de la cultura gastronómica, por sus técnicas de elaboración y por la cantidad de adeptos que posee en todo el mundo.

Se conoce como repostería a la actividad que desarrolla un repostero, persona que se dedica a elaborar pasteles, tortas, dulces, budines, galletas y todo tipo de postres

Usualmente, el concepto se emplea con referencia a la elaboración de productos alimenticios dulces. Entre los ingredientes más utilizados en la repostería se encuentra el azúcar, el chocolate, la vainilla, la nata o crema de leche, así como la harina y los huevos.

Existen diversas técnicas para lograr que las preparaciones resulten esponjosas, uno de los secretos para tener este resultado es que no se deben amasar demasiado las mezclas con harina de trigo para no potenciar la propiedad elástica que tiene el gluten; el caso contrario de cuando se elabora el pan.

Un aspecto muy resaltante de la repostería es la decoración. En virtud de que los pasteles y las tortas suelen servirse en banquetes y celebraciones, se busca que su apariencia sea distintiva y agradable. Por esta razón se cuida mucho la presentación, colores y texturas de los postres.

Las creaciones de la repostería se venden en comercios conocidos como confiterías y pastelerías. Cuando el local en cuestión vende también alimentos salados, por lo general se trata de una panadería, aún cuando venda otros productos y víveres además del pan.

Debido al auge que ha experimentado el arte culinario y de manera específica, la repostería en todo el mundo, actualmente son numerosos los premios y galardones que se entregan a los mejores profesionales en esta área. Precisamente, uno de los países que destaca a nivel internacional por la calidad de sus reposteros es España.

Ahora bien, puede hacerse una distinción entre la repostería artesanal y la repostería industrial. Mientras que en la repostería artesanal se trabaja a mano y se emplean ingredientes naturales, en la repostería industrial suelen utilizarse saborizantes y conservantes por tratarse de elaboración en serie, es decir en grandes cantidades, cuyos productos son comercializados en un mercado de personas mucho más amplio.

De igual manera nos encontramos con la repostería casera, la cual, como su propio nombre lo indica, es la que se lleva a cabo en los hogares y que por regla general, se desarrolla siguiendo recetas de gran tradición familiar, las cuales se han transmitido de generación a generación, desde las abuelas, hijas y nietas.