12 Razones para adoptar un gato

Un gato no es el mejor amigo del hombre, pero hay muchas ventajas de tener un felino en la casa. Estos amigos se pueden robar nuestro corazón y el de toda la familia. Por ello, presentamos algunas razones para animarnos a adoptarlos.

1) Un felino es un cazador, así que no hay que preocuparse por bichos molestos que puedan invadir nuestro hogar. Así no los vayan a perseguir, los roedores se sienten intimidados ante su presencia.

2) Los gatos son bastante ordenados, les gustan las rutinas y no harán destrozos en nuestra casa.

3) No necesitamos bañarlos cada quince días como a un perro. Un gato se asea solo varias veces al día.

4) Se puede entretener con cualquier cosa. Puede jugar solo, así que no necesitamos estar tirándole un ratón de hule a cada instante.

5) Saben dónde hacer sus necesidades. No ensuciarán la casa si es que tienen un lugar establecido como su baño.

6) Son limpios para comer, no babean o tiran la comida por el piso. Son pacientes al momento de ingerir sus alimentos.

7) Pese a ser bastante independientes y hacer muchas cosas solos, siempre necesitan amor humano. Un gato irá hacia nosotros cuando necesite unos masajes. Se sabe que su energía puede reducir la tensión y el estrés.

8) Se adaptan fácilmente a espacios reducidos. A diferencia de un perro, los gatos pueden ocupar los espacios altos.

9) Suelen ser muy silenciosos y tranquilos, por lo que difícilmente recibiremos quejas de los vecinos por causa de sus ruidos.

10) Los hay de todos los colores, formas y tipos de pelaje. Cada uno con personalidad distinta.

11- Dar una segunda oportunidad a un gato es lo más importante, muchos de estos felinos sin hogar ya han gastado bastante de sus siete vidas. Han vagado por las calles, han sido maltratados o simplemente no han conocido qué significa dormir en un lugar seguro y recibir el cariño de grandes y pequeños.

12.- Con la adopción evitaremos que el gato sea tratado como mercancía. Si queremos a los gatos, seguramente deseamos lo mejor para ellos y su comercialización en masa no suele guiarse precisamente por esta filosofía.

Aunque los gatos más cachorros suelen ser los que más nos llaman la atención, no siempre es la mejor opción. Un gato pequeño requiere de mucha más atención y cuidados y su carácter aún no está formado, mientras que un gato adulto ya tiene su manera de ser definida, con lo que puede ser una muy buena opción para adoptar.