Fecha de publicación: 17-10-2014
La ecología, en la complejidad y diversidad de elementos que centran su estudio, se puede clasificar en varias disciplinas o vertientes.
La ecología social es una disciplina filosófica que busca una visión humanista del medio ambiente, fundamentada por una relación holística de los seres naturales incluyendo a los seres humanos. Establece que existe un orden natural que no admite un mando centralizado, asumiendo que la naturaleza se puede auto-regular y que los seres humanos se pueden organizar de la misma forma.
Ecología botánica, fundamentada en la rama de la biología que estudia a los vegetales desde todos los aspectos posibles como su descripción, clasificación, morfología y relaciones entre si, además de la relación con otros seres vivos.
Ecología microbiana, se refiere a la rama de la ecología que estudia a los microorganismos en su hábitat natural.
Ecología matemática: aplica la metodología de la ciencia matemática para tratar los problemas derivados de la relación de los seres vivos con su ambiente. Constituye la base para la formulación de los enunciados teóricos de la ecología.
Ecología de recreación: Estudia las relaciones ecológicas entre el ser humano y la naturaleza en el contexto recreativo. Es de gran importancia para el turismo sostenible y el manejo adecuado de áreas naturales protegidas para fines de esparcimiento.
Ecología del paisaje: Está enfocada en el estudio del impacto que pueden generar los grupos humanos sobre los paisajes naturales siendo el hombre un poderoso ente transformador de la dinámica físico-ecológica de su entorno.
Entre otras disciplinas de la ecología, se pueden enumerar la Limnología que estudia los sistemas acuáticos continentales como lagos o ríos; la Dendroecología que se basa en el estudio de la ecología de los árboles.
La clasificación de la ecología en otras disciplinas, permite el abordaje detallado y minucioso de todos los elementos e interacciones que pueden registrarse entre los seres vivos y su ambiente.